La diferencia entre cables y conductores no suele ser clara y a menudo se usan indistintamente.
Tanto cables como conductores pueden estar hechos de diversos materiales como cobre o aluminio. También pueden tener diferentes grosores y longitudes.
La principal diferencia que se puede considerar es el propósito y el aislamiento.
Los cables eléctricos deben estar siempre correctamente aislados, porque se utilizan en exteriores, por ejemplo, se colocan en el suelo o bajo el agua. Generalmente, el aislamiento es de plástico o caucho y sirve para prevenir descargas eléctricas e incendios.
Además, un cable eléctrico suele tener un grupo de conductores.
El conductor eléctrico puede tener aislamiento, pero generalmente no lo tiene. Normalmente, un conductor eléctrico con aislamiento está adaptado a voltajes bastante bajos, máximo 6 kV. Los conductores eléctricos se utilizan en interiores.